Pensamiento Cristiano
Cómo acabar bien. De zapatos viejos, temporadas, trampas y antídotos (quinto brochazo)
Mantenga en mente que las trampas son parientes malos y se nos acercan en combinaciones, rara vez solas. Tampoco están escritas en algún orden significativo, porque su asalto en contra de nosotros es personalizado en cuanto a lo que somos, y el archienemigo definitivamente conoce sus tácticas.