
Pacto inquebrantable
Hoy más que nunca debemos tornar nuestra vista a lo que es vital, fortalecer y rescatar la imagen del matrimonio. Debemos replantearnos lo que conlleva sacarlo adelante, bajo los preceptos bíblicos únicamente.
Hoy más que nunca debemos tornar nuestra vista a lo que es vital, fortalecer y rescatar la imagen del matrimonio. Debemos replantearnos lo que conlleva sacarlo adelante, bajo los preceptos bíblicos únicamente.
Satanás hace bien su tarea con nosotros y busca pequeñas fisuras en nuestro corazón, mente y carácter para entrar y hacernos pedazos. Él no busca entrar por las puertas grandes que son muy obvias, sino busca entrar sigilosamente y tomarnos por sorpresa, y la mayoría de las veces lo logra.
Al no soportar y aceptar el reinado de Jesús, ¿estaremos siendo como Herodes que no soportó la idea de que alguien más reinara y mandara sobre él? ¿Queremos tener la paz que se anuncia y se canta en estas épocas tan lindas? Bueno, es necesario tener al Cristo redentor, pero también al Cristo que gobierna.
El verdadero cristianismo nos enseña que debemos aprender a vivir en escasez y también en abundancia. Todo lo podemos en Cristo, porque nuestro gozo no depende de las circunstancias o de cómo nos esté yendo. ¡Nuestro gozo depende de aquel que ya venció a este mundo!
Nosotros, al igual que nuestro Señor, necesitamos estar conectados tanto con el Padre como con su Hijo para tomar decisiones correctas y andar por el camino que tenemos que andar.
No se trata de esperar pasivamente, sino activamente, tomando nuestras responsabilidades. Dios no nos ha dejado ni nos dejará solos, pero él no hará nuestra parte. A nosotros nos toca hacer mucho, pero la gloria siempre es para él.
La importancia del cuidado y protección de la familia: En Jesús, este jefe de la sinagoga encontró al Salvador que buscaba, al único que puede transformar la muerte en vida. Nosotros como papás debemos de llevar a nuestros hijos a los pies del Hijo, confiando en que él los cuidará y sanará en toda situación.